ENCUENTRO HISTORICO
14 MAESTROS TOCAN SOLOS DE BANDONEON CON EL FUEYE DE ANIBAL TROILO”
Todo comenzó en julio de 1975, habían pasado dos meses de la muerte de Troilo cuando Zita, su inolvidable compañera, convocó a Raúl Garello a su casa. El motivo era entregarle uno de los bandoneones del Gordo.
Garello conservó durante treinta años este instrumento y el 11 de julio de 2006, lo donó al Museo de nuestra Academia Nacional del Tango, para ser exhibido y tocado.
A comienzos del 2011, pensé en la posibilidad de grabar un disco convocando a solistas que pertenecieron a la época troileana, es decir, aquellos que compartieron escenarios, música y abrazos con Pichuco.
El primer paso fue preguntarle al maestro Garello si el fueye estaba en condiciones y luego con Raúl y Horacio Ferrer llevarlo al restaurador Carlos Ferrío, quien después de tres semanas me entregaba el doble A listo para grabar. Ahí comenzaba otro desafío: convocar a los maestros.
Cada encuentro tuvo un denominador común, al pronunciar la palabra mágica se les iluminaba la cara, esa palabra mágica era: Troilo. Muchas veces me toco visitarlos en sus casas acompañado del instrumento y el solo hecho de verlo y tocarlo provocaba en ellos una energía que podía lograr hasta lo imposible.
El 16 de febrero de 2012, iniciamos las grabaciones de los solos en Ion y entonces volvieron a pasar momentos mágicos. Los maestros llegaron al estudio con sus arreglos escritos a lápiz y en la enorme sala abrazaron nuevamente a Pichuco, al tomar el bandoneón y ponerlo en sus rodillas.
Luego de siete jornadas, el 2 de julio terminamos la masterización del disco signado por el número 14 que me llevó a pensar en las coincidencias del encuentro: el año de nacimiento de Troilo, el Caño 14, Los 14 con el Tango y las 14 grabaciones de los viejos larga duración.
Troilo Compositor es el testimonio histórico de tres generaciones de bandoneonistas entre los 65 y los 90 años. Gracias maestros por confiar incondicionalmente en esta idea y ofrendar tanto talento y corazón.
Gabriel Soria